Síntesis del capítulo, Números 30

Síntesis del capítulo, Números 30

Como el listado de sacrificios adicionales, también nuestro capítulo trata sobre una cuestión que aparentemente no está relacionada en forma directa con los preparativos para el ingreso a la tierra: la cuestión de las promesas y la anulación de las mismas. La Torá cita la ley de la promesa de un modo básico, y luego brinda detalles en relación a las promesas de mujeres-que depende del estatus de la mujer.

Apertura (Versículos 1-3)

El texto inaugura la sección de las promesas así: “Un hombre, cuando formulare un voto ante El Señor, o formulare juramento para atarse a sí mismo con prohibición, no habrá de profanar su palabra, como todo lo que sale de su boca, habrá de hacer” (Versículo 3). La sección aborda el interrogante acerca de cuándo las promesas entran en vigencia y cuándo pueden ser anuladas. La sección está construida en forma de particular y colectivo, de modo que lo colectivo figurará solamente al final de la sección.

Promesa de una mujer en su juventud (Versículos 4-6)

Una mujer libre se halla bajo la potestad del padre, y por lo tanto, si ella realizó una promesa al estar bajo la potestad paterna, y su padre no le impidió realizar la promesa, la promesa recae sobre ella. Pero si su padre “le impidiere” realizar la promesa “en el día de escuchar él”, sus promesas no entran en vigencia “Y el Señor la perdonará ya que la ha impedido su padre a ella” (Versículo 3).

Promesa de una mujer casada (Versículos 7-9)

El mismo principio recae también sobre la mujer casada, sólo que esta vez en lugar de su padre se encuentra su marido. Si el esposo escuchó a su mujer prometiendo, y él se desentiende de ello-la promesa es contraída. Si él escuchó y se lo impidió, sus promesas son anuladas “y el Señor la perdonará” (Versículo 9).

Promesa de una mujer viuda o separada (Versículos 10-13)

Con respecto a los versículos 11-13 hay una controversia entre los comentaristas. Rashi, a partir de Jazal, nuestros Sabios de Bendita Memoria, supone que se trata de una mujer casada (y el pasaje anterior se refirió a la mujer comprometida). Rabi Abraham Ibn Ezra y Abarbanel explican tal como lo sostuvimos nosotros aquí, que el actual pasaje trata sobre la mujer viuda.

Resumen (Versículos 14-17)

En el final del capítulo, el texto sintetiza las leyes de las promesas y cita el principio colectivo “Pero si guardare silencio su esposo – del día para el día-habrá convalidado todos sus votos, o todas sus prohibiciones que pesan sobre ella. Los ha convalidado, pues ha guardado silencio ante ella en el día de oírlo él. Pero si anular los anulare después de oírlo a él se cargará con la iniquidad de ella” (Versículos 15-16).

Editado por el equipo del sitio del Tanaj.

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