Reproche

Reproche

Debarim es la Parasha de la Tojaja, del Musar. Los días de Moshé se acercan a su fin, el pueblo judío se acerca ya a la tierra Prometida. Aaron y Miriam han muerto ya y Moshé sabe   que no entrará a la Tierra Santa.

La antigua generación ya ha desaparecido. El desierto ha sido su tumba, y una nueva    generación se apresta a luchar y a triunfar. El galuth concluye, comienza la redención.

 Pero antes de toda lucha, nos prescribe la Torá, vendrá el sacerdote y leerá ante los judíos los preceptos de la guerra, la Parasha de la Miljama. Aun en la misma Tumah, en el más    "amoral" quizás de los actos es posible elevarse, y por ello es el verdadero soldado judío de acuerdo a la Torá muy distinto al común de los soldados y necesita de su elevación espiritual. El pueblo se apresta a cruzar el Jordán. Pero Moshe los detiene un instante, los postreros para infundir en el pueblo que se lanzaba a la vida, un espíritu, su espíritu judío.

Que significa Tojajá? Su significado literal es "reproche”, “represión", más su verdadero sentido supera todo esto. Su verdadero sentido nos muestra la unión entre los seres y su mutuo deber y responsabilidad.

El precepto de Tojajá la hallamos en la Parasha "kedoshim" y es interesante detenerse sobre ella y su significado:

"No aborrezcas a tu hermano en tu corazón, reprenderás a tú prójimo, y no llevarás sobre él pecado".

No te vengues, ni guardes con los hijos de tu pueblo, y amarás a tú prójimo como a ti mismo, yo soy tu D’s”.          

לא תשנא את אחיך בלבבך, הוכח תוכיח את עמיתך, ולא תשא עליו חטא.

לא תקם ולא תטר את בני עמך, ואהבת לרעך כמוך, אני ד'

Estos pequeños versículos (Vaikra XIX 17, 18) nos muestran el Universo de la Tojajá y su verdadero sentido, y al traducirlos hemos conservado su sentido literal, para que su verdadero significado no se desvirtúe en una interpretación. Detengámonos pues, unos instantes ante estos problemas.

 

“No te vengues, ni guardes". Si te han hecho algún mal, "no te vengues”, ni guardes encono por él, es decir:                                  לא תקום ולא חטר

Rashi, el gran exegeta nos muestra la diferencia entre estos dos ejemplos en su tan popular y bello estilo: "Le digo, préstame tu hoz", le respondió, "no”. Al otro día le dijo el otro: "préstame tú hacha, y le contestó: "No te la presto, al igual que tu no me la has prestado" esta es Nekima. Que es Neira? "Préstame tu hacha le respondieron "no". Al otro día le pidieron al primero su hoz, y este dice: "Tómala, no soy igual a ti, esta es NETIRA que guarda (Noter) el odio en su corazón, aunque no se vengue".

Este sencillo y simple comentario nos muestra exactamente la diferencia entre los dos preceptos de NEKIMA Y NETIRA.

No nos podemos vengar de nuestro prójimo, no podemos hacer el mal, pero el problema no es sólo en su aspecto exterior sino también y sobre todo en su aspecto interior.

 El hombre debe elevarse a tal Madreiga, a tal altura espiritual que las vicisitudes no puedan hacer mella en él. El hombre refleja en todos sus actos sus sentimientos interiores y no son solamente los actos los que hay que cuidar sino especialmente sus "sentimientos interiores". La NEKIMA Y LA NETIRA son por ello, en el fondo lo mismo. No interesa su significación social que en el primer caso es negativa ("mal") y en el segundo positiva ("bien").

Importante es saber la reacción del hombre ante los problemas a lo que la vida lo somete.

Y qué significa "LO TIKOM VELOTITOR", cuál es su significado, su verdadero sentido? Para diversas concepciones la respuesta es sencilla. Para el cristianismo es esto producto de la teoría que prescribe "dar la mejilla izquierda cuando te pegan en la derecha"...No es así sin embargo para el judaísmo. Moshé al ver a un hombre pegando a su compañero le grita "Malvado, porque maltratas a tu compañero?", y cuando el Egipcio maltrata al esclavo judío, Moshé le hace pagar su maldad y alevosía con la vida!

En todo castigo existe hasta cierto punto, y recalco “hasta cierto punto", algo de venganza, pero que tiene una función, un carácter social. El principal deber es siempre el de "extirpar el mal", y muchas veces aún con la fuerza, con el poder, con la lucha. Sin estos principios y si hubiésemos seguido los preceptos budistas y cristianos, aún viviríamos bajo el yugo y la opresión, o quizás en un régimen feudal y absolutista, bajo un opresor de otro déspota.

La prohibición de "vengarse" es algo distinta, algo superior. Y no he hallado una mejor definición que la que el JAFETZ-JAIM cita de un sabio judío con un rústico pero instructivo ejemplo: "Un hombre busca a Rubén, preguntando donde lo puede encontrar, le respondieron que quizás se halle entre cierto grupo de personas. Fue allí pero no encontró a Rubén. Debería encolerizarse acaso sobre los que se hallan allá reunidos, porque sus nombres son Shimon o Levy y no Rubén? No, debe continuar su camino hasta encontrar al verdadero Rubén. De la misma manera, para que encolerizarse sobre quien no me ha hecho el bien? no es este destinado por el Señor, debo continuar buscando....”

El JAFETZ JAIM concluye: Feliz de aquel que se representa esto siempre en su pensamiento... y su corazón sea Íntegro y sano, no se despertará su envidia, y no se vengará...” En este rústico y sencillo ejemplo se oculta un magno pensamiento, el verdadero sentido de aquella Mitzvá.

El hombre debe estar por encima de las vicisitudes de la vida, los problemas no deben quebrantarlo, no deben vencerlo. El hombre debe sobreponerse a ellos, debe triunfar. Toda venganza es una falta de fé, un error y por ello un pecado. "Y ni aunque aquella persona se llame Reuben, y no Shimon o Levi, si aquella persona no nos ha dado lo que hemos deseado lo que hemos buscado no debemos ver solamente el “fenómeno”, el hecho que él nos ha negado, sino "que se nos ha negado”!. Aquel que ve más allá de sus raíces, no se dejará vencer por las dificultades, no se vengará, sino que seguirá luchando, seguirá buscando.

Este es el sentido de la Mitzva, de la prohibición de la Nekamá. El mal no debe hacer en nosotros mella, no nos debe llevar a otro mal, no debe trastornar nuestro equilibrio espiritual, no debemos responder al mal con el mal, porque nos dañamos a nosotros mismo, porque causamos el mal a nuestro espíritu.

Para comprender mejor este principio del "LO TIKOM VELO TITOR", recordemos con el JAFETZ JAIM lo que el Talmud Yerushalmi (Nedarim LXXXIX) citado por el SMAG (Sefer Mitzvot Gadol) nos significa: "Iba una persona por un camino, y uno de sus pies golpeó en el otro, y cayose al suelo, y se golpeo, y golpeo ese pie también. No solamente no dejara de pensar en curarlo también, sino que ni siquiera odia a su culpable pie, que es su pié, sino el mismo?

Ese es el principio de "LOTIKOM VELO TITOR" . Si ese hombre comprende que es parte orgánica del todo, de la comunidad, de la sociedad, si Ilegal a tal altura espiritual, comprende también que él es parte en el todo y que odiar al prójimo es odiarse a sí mismo.

Hubo una vez una secta herética judía,  "los franquistas", que creían en su falso Mesías Frank y que no pocos sufrimientos causaron a nuestro pueblo. Debido a repetidas instigaciones los príncipes polacos llamaron a una discusión pública entre los frankistas y los rabinos judíos entre los cuales se hallaba el Baal Shem Tov, gracias al cual los judíos triunfaron. Los "frankistas" fueron Obligados a convertirse al cristianismo por los príncipes polacos. Muchos de los judíos se alegraron por el feliz resultado de la discusión, pero el Baal Shem Tov entristecido exclamó: “Mientras el miembro está unido al cuerpo hay esperanza aun, después es ya demasiado tarde…” Aun en sus herejías los frankistas mientras no fueron convertidos eran aun judíos y estaban aún unidos al cuerpo", luego fue ya demasiado tarde.

Y esta es la verdadera y magna concepción judía. Cuando un miembro está enfermo, y retornamos a la parábola Talmúdica, todo el mundo sufre, pero el hombre piensa en sanarlo pues el miembro es el mismo, es él. Solo cuando en el miembro se halla la gangrena o el cáncer, Jalila, el cirujano se ve obligado a extirparlo pues lleva el mal al cuerpo todo, y en tales casos, no son acaso el mal? Mientras el miembro se halla unido, aún hay esperanzas.

El niño cuando tropieza con un objeto inanimado, lo castiga. Si se golpea en una mesa, la golpeará por su maldad. Un demente es capaz de golpearse si se cree culpable, y si tropezó con su pié, por ejemplo -- descargará sobre él su furia toda. El que se venga no comete acaso igual necedad?, no comprende que todos los hombres, que la comunidad es una unidad, y he aquí su pecado. Es por ello que el LO TIKOM VELO TITOR se hallan unidos íntimamente con la Tojajá, la obligación de reprender a su prójimo, de guiarlo por la senda de la rectitud, por el camino del bien.

No se extirpará el miembro, se lo curará. La venganza es la extirpación, la Tojajá es la curación, es el retorno al bien. Y no se hace bien al prójimo, se hace el bien a sí mismo, pues todo es una unidad.

כל ישראל ערבים זה לזה

"Todos los judíos son responsables por aquel”. Todos debemos sentirnos responsables por nuestros prójimos, y debemos luchar por el bien de la comunidad y del individuo.

Solo así hemos de cumplir el máximo precepto del judaísmo.

ואהבת לרעך כמוך, אני ד'

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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