Mishkan - Sentido de la vida

Mishkan - Sentido de la vida

Shemini nos presenta los primeros días del Mishkan que ni aún los trágicos sucesos de los hijos de Aarón pudieron empañar. Todo el significado del Mishkan es resaltado en esta oportunidad, y es interesante detenerse sobre las palabras y disposiciones de la Torá, que nos hablan sobre estos principios.

Moshé habla a los sacerdotes y al pueblo:

“ויאמר משה זה הדבר אשר צוה ד´תעשו וירא אליכם כבוד ד´"

"Dijo Moshé, esto es lo que ordenó el Señor hacedlo y ante vosotros aparecerá el esplendor del Señor" (IX,6). El Midrash agrega:

אמר להם משה אותו יצר הרע העבירו מלבכם ותהיו כולכם ביראה אחת ובעצה אחת לשרת לפני המקום. כשם שהוא יחידי בעולם, כך תהיה עבודתכם מיוחדת לפניו. ואם עשיתם כך: וירא אליכם כבוד ד´ 

 

"Y dijoles Moshé aquél mal instinto sacad de vuestros corazones, y estaréis todos con un consejo y temor sirviendo al Señor".

Así como El es uno, así será vuestro servicio único, y único para él. Si así lo hicisteis, del Señor ante vosotros aparecerá el esplendor".

Este Midrash encierra en sí principios que la Torá considera fundamentales en su concepción, y todos ellos se resumen en el principio de la Unidad. En tal sentido sigamos las ideas que sobre este Midrash desarrolla el MAGUID MIDUBNA.

Los Jajamim nos hablan de la "Asefat Jajamim" y el “Kesher Reshaim", es decir la unión de los sabios, y el complot de los malvados.

Sin embargo la verdadera unión sólo es posible entre los justos y no entre los malvados donde cada uno tiene en cuenta no el bien común sino sus propios intereses.

Lo mismo notamos en el hombre. El Midrash nos dice en una oportunidad:

“צדיקים לבם ברשותם, רשעים ברשות לבם"

 "Los justos dominan su corazón (es decir sus inclinaciones), los malvados son por ellos dominados". El hombre posee inclinaciones, fruto de sus instintos, y es capaz de dominarlos o dejarse llevar por ellos. El hombre que se deja llevar por sus instintos, por su pasión o furor en modo alguno es uno, pues no posee plan alguno en su vida. El hombre que no domina su existencia, no puede tampoco conservar su alma íntegra y una. Y si esto no ocurre con el individuo menos aún con la comunidad. La unidad en el individuo y en la comunidad dependen de su finalidad, de su justicia, y solo cuando tiene un sentido superior puede la comunidad ser lo que debe ser. Este es el sentido del Midrash. "Aquel mal instinto", el Ietzer Hara, debe ser extirpado de los corazones, del individuo y de la comunidad, y sólo entonces llega la vida a su verdadera altura espiritual.

Y este es el significado del Mishkan. El Mishkan es el espíritu judío que en medio de la comunidad la eleva al darle su sentido y destino. El Mishkan une a todo el pueblo a su rededor, y no solo materialmente. El único lugar donde la Avodá, donde los sacrificios fueron permitidos era el Mishkan y posteriormente el Beth Hamikdash. Más no era solamente esta unión material, práctica. El Mishkan unía a todo el pueblo con su contenido espiritual. Así como el Señor es Uno, así es uno el pueblo. El pueblo se une con su creencia e ideal, y solo así solo si el hombre y la comunidad se guían y viven de acuerdo a sus principios aparecerá ante ellos la gloria del Señor.

El Mishkan es pues el símbolo del espíritu en Israel, y esto resalta de otra de las disposiciones de esta Parasha, la prohibición de los Kohanim de tomar vino antes de entrar al Mishkan.

Porqué la prohibición del vino en el Santuario?. El Santuario, y así lo entiende la Torá es el lugar de la alegría, porqué justamente en él habría de prohibirse el vino que alegra los corazones de hombres y deidades".

En Ierushalaim había según el Midrash en las afueras de la ciudad un lugar especial para las meditaciones, para no entristecerse en Ierushalaim!

La Torá es sobre todo la enseñanza de la alegría, pero de la verdadera alegría. La fiesta más alegre es según el Talmud, Simjat Beth Hashoeba.

“מי שלא ראה שמחת בית-השואבה, לא ראה שמחה מימיו"

Aquel que no ha visto la alegría de Beth Hashoeba, no ha visto alegría en su vida". Y esta festividad era la de traer agua al altar en Sucot. La máxima alegría era pues la alegría del agua, y no la del vino!, pues estas dos alegrías representan dos visiones del mundo.

"Dad cerveza al desfallecido y vino a los de amargo ánimo", exclaman los proverbios (XXXI, 6). No fué creado el vino sino para aliviar a los dolientes y consolar a los enlutados, agregan los Jajamim, y he aquí el verdadero sentido de la cuestión. El vino alegra el espíritu, pero atontándolo, matándolo. El vino es aquella falsa alegría que se compra y que embota al alma. La alegría del Mikdash debe por el contrario ser la verdadera:

“שמחתי באומרים לי בית ד´ נלך"

“Alegreme con los que de decíanme: Iremos a la Casa del Señor". Aquel que no ha visto la alegría del “agua", no ha visto verdadera alegría, pues la del “vino", es fingida y falsa. Y el Mikdash es la verdad.

Es por ello que en el Mikdash el vino estaba tan terminantemente prohibido. La tristeza se halla fuera de Jerusalén, pues ella es la ciudad de la alegría y la felicidad.

Y nuevamente no es la Torá la enseñanza del ascetismo y del placer del sufrimiento, sino Torat Jaim, la enseñanza de la vida!. En los Proverbios de nuestros Jajamim, Pirkei Abot, encontramos una corta frase en este sentido:

"Rabí Shimón dice: "Tres que comieron en una mesa, y sobre ella no se ha escuchado las palabras de la Torá, es como se hubiesen comido de los Zibjei Metim (sacrificios ofrecidos a los muertos)".

Sobre este Midrash se detiene el Rabino Klein Zijrono Libraja, en su Jojma Im Najala.

En el Talmud hay una pequeña frase característica: "Cuan tontos son estos babilonios que comen pan con pan". En esta frase a pesar de su sencillez, se halla condensada la idea sobre la cual se detienen los Jajamim en sus proverbios. El hombre se alimenta, come y bebe. Cuán sin sentido es sin embargo su comida, si esta no tiene otro fin que el de seguir comiendo y cuán sin sentido es su vida, si todo lo que busca es subsistir y seguir.

Si nace para morir, vivir es morir poco a poco y la vida es un sacrificio a la muerte, Zibjei Metim.

Llegará el momento en que el perecedero cuerpo se rinda ante la inexorable naturaleza y siga su destino. Qué sentido tiene pues el comer y beber. Vivir para vivir?.

Este es el sentido de la mesa con Divrei Torá, con las palabras de la Torá. El espíritu da a la existencia material su sentido y significado su razón de ser. Por intermedio de la materia debemos elevarnos en el mundo espiritual y por ello, la materia misma se vuelve hasta sagrada y la Beraja la santifica.

Este es el resultado del Mishkan. Cual las palabras de la Torá en la mesa, es el Mishkán, el Santuario el que da al hombre su sentido, el significado de su vida, y así la mesa se transforma en un altar, y todo hombre en un Sacerdote

No existen momentos profanos en la vida del hombre. Todo se vuelve sagrado, su alma lo es. El Julin debe ser extirpado por la Kedusha.-

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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