Y ordenó Moshé, junto con los ancianos, de Israel al pueblo diciendo: guardareis todo el precepto que hoy te ordeno. Y será, en el día en que cruces el río Jordán,  hacia la tierra que te dio el Eterno tu Dios, que levantarás para ti, piedras grandes y las revocarás con cal, y escribirás en ellas todas las palabras de esta Torá, apenas hayas cruzado el Jordán para entrar a la tierra que te da el Eterno, tu Dios, tierra que mana leche y miel, tal como Él se lo prometió a tus padres. Cuando hayas cruzado el Jordán, levantarás estas piedras en el monte Eval y las revocarás con cal. Y construirás un altar de piedras al Eterno, tu Dios, será un altar de piedras a las  que no haya tocado el hierro, erigirás el altar con piedras enteras y sobre él ofrecerás tus holocaustos. Y también presentarás allí tus ofrendas pacíficas y las comerás en ese lugar y te alegrarás ante el Eterno, tu Dios. Y escribirás en las piedras todas las palabras de esta Torá con mucha claridad. 

Contexto
Moshé antes de fallecer se preocupa de incentivar y estimular a Israel para que no se olviden y cuiden el pacto entre ellos y Dios, es por eso que antes de morir vuelve a renovar el pacto y les ordena que luego que crucen el Jordán, cuando él ya no esté, dejen plasmado este pacto sobre piedras grandes a la entrada de la tierra.
Preguntas
• ¿Cuál es el objetivo de estas piedras?
• ¿Por qué debían ser piedras grandes?
• ¿Por qué deben ser revocadas con cal?
• ¿Por qué deberían colocarlas justo en el monte Eval y no en otro monte? 
• ¿Por qué es tan importante este monte? 
• ¿Qué pasó allí? 
• ¿Cómo sabemos dónde es este monte? 
• ¿Para qué nos dice: en el día en que cruces el río Jordán,  hacia la tierra que te dio el Eterno tu Dios? Si están cruzando el Jordán, se sobreentiende que es hacia la tierra de Israel. 
• ¿Por qué repite el tema de escribir en  las piedras las palabras del pacto?
• ¿Acaso deben escribirlas en el mismo día que cruzan el río? 
• ¿Deben  ser piedras que saca del río Jordán?
• ¿Qué era exactamente lo que debían escribir en esas piedras?
• ¿Dónde deben escribir: en el altar o en piedras enteras?
• ¿Por qué la Torá  hace tanto hincapié en que sea escrito en piedras grandes?

Respuestas
Cuando dice piedras grandes se refiere a que sean lo suficientemente grandes como para que entre en ellas todo lo que hay que escribir o una segunda posibilidad, es que deben ser grandes porque lo que se va a escribir allí es muy importante y cuando algo es muy grande llama más la atención y se conservan más tiempo (como por ejemplo las pirámides de Egipto)
El hecho de que las revoque con cal, es para que se pueda escribir más fácilmente sobre ellas. Si fuera un texto pequeño es factible que lo talle, los diez mandamientos son 172 letras, pero cuando hay que escribir un texto muy grande, como dice aquí: Toda la Torá, entonces tiene que ser escrito, no tallado, y se hace con cal, para que sea más fácil de escribir y que se mantenga por mucho tiempo.
El motivo por el cual nos dice: en el día en que cruces el río Jordán,  hacia la tierra que te dio el Eterno tu Dios, es porque Moshé se refiere a que deben hacer esto en el día en que pasen el Jordán para quedarse, para conquistar la tierra de Israel en forma definitiva, no cuando cruzan  para espiar la tierra o conocerla y luego volver a salir. Es por eso que el versículo continúa: y escribirás en ellas todas las palabras de esta Torá, apenas hayas cruzado el Jordán para entrar a la tierra que te da el Eterno
El gran mensaje es que para merecer entrar y asentarse en la tierra de Israel, deben cumplir el pacto que establecieron con Dios. El objetivo no es solo escribir, sino que la escritura es la condición para poder asentarse en la tierra y para ello lo escriben, para recordar que gracias a ese pacto, que deben cumplir, podrán asentarse en la tierra, tal como Dios les prometió a los patriarcas. Ese es el objetivo de este versículo, recordar el sentido de lo que dice esta escritura, no la prescripción de la escritura en sí.
Hay quienes dicen que este suceso lo hicieron cuando nos relata en Yehoshua 4:1 cuando al cruzar el Jordán, y les pide a 12 hombres que tomen 12 piedras del río Jordán en donde se detuvieron los pies de los sacerdotes que portaban el arca cuando se abrió el río Jordán. Lo que los llevó a pensar así, fue que Moshé les prescribió que al cruzar el Jordán escriban las piedras.
Pero no necesariamente se debe explicar así, sino que lo que Yehoshua hizo en ese momento fue establecer un recordatorio del lugar en donde cruzaron. 
La ordenanza de Moshé no era que apenas crucen el Jordán, en ese mismo día, debían escribir las piedras. Es por eso que debemos afirmar que esto sucedió en lo que nos relata en el libro de Yehoshua 8:30-32 que dice: "Entonces Yehoshua construyó un altar al Eterno en el monte Eval, tal como Moshé, siervo del Eterno, ordenó a los hijos de Israel, según está escrito en el libro de la Torá de Moshé: un altar de piedras enteras sobra la que ningún hombre haya alzado herramienta alguna, y ofrecieron allí holocaustos al Eterno y sacrificios pacíficos, y él escribió allí, sobre las piedras una copia de la Torá de Moshé." Vemos claramente que este es el texto que nos está hablando del cumplimiento del precepto ordenado por Moshé. 
En este párrafo dice exactamente lo que dijo Moshé, hicieron el altar para ofrendar sus holocaustos en el monte Eval y escribieron sobre las piedras.
¿Qué es lo que escribieron? Hay quienes dicen que se refieren al libro de Debarim, que es todo lo que Moshé les habló. Otros sugieren que son solamente los 10 mandamientos, y hay quienes sostienen que se trata de ciertas partes del libro de Debarim.
Debían ser escritas sobre las piedras del altar, que eran enteras, pues ninguna herramienta humana las había trabajado.
¿Por qué la Torá  hace tanto hincapié en que sea escrito en piedras grandes? Pues si lo hubieran escrito sobre la tierra, a la primera lluvia se hubiera borrado, es por eso que debía ser sobre la piedra, para que perdure y no se borre.
El motivo por el cual deberían ser colocadas en el monte Eval, es por lo que dijo en Debarim 11:26-30, allí dice que cuando entraran en la tierra de Israel debían dividirse en dos montes para las bendiciones y las maldiciones, en los montes Eval y Guerizim. Justamente para darnos a entender que la bendición y la maldición dependen del pacto del pueblo con Dios. Si van por Sus caminos, entonces tendrán bendiciones.
No obstante, ¿Por qué hacer un altar?
El primer pacto que hace Moshé entre el pueblo y Dios es en el monte Sinaí, Moshé les lee todas las palabras del pacto y todo el pueblo responde: haremos y entenderemos y allí (Éxodo 24:4) dice que Moshé construyó un altar hecho con 12piedras grandes de una sola pieza.
También encontramos algo parecido en Reyes I 18:30-32 en donde el profeta Eliahu hace un altar a Dios con 12 piedras acorde a las 12 tribus de Israel, cuando todo el pueblo va a decir: "El Eterno es nuestro Dios". Eliahu hace este altar en el monte Carmel. 
Vemos de todo esto que el altar con las 12 piedras nos viene a recordar el primer pacto que hizo el pueblo en el monte Sinaí. Una reconstrucción de aquel suceso en que todo comenzó.
¿Cuál es el motivo por el cual debe ser hecho justo en el monte Eval? ¿Por qué es tan importante este monte? ¿Qué pasó allí? ¿Cómo sabemos dónde es este monte? 
Cuando la Torá en Debarim 11:30 nos habla acerca de las bendiciones y las maldiciones en el monte Guerizim y el monte Eval, allí nos describe muy específicamente dónde queda este monte y dice: "¿Acaso no están estos dos montes cruzando el Jordán, pasando el camino del poniente, en la tierra de los Cnaanitas que habitan en la Araba, frente al Gilgal y cerca de Eloné Moré?
De todo esto vemos que la Torá se esfuerza mucho en detallar el lugar exacto en donde quiere que se haga esto. 
¿Por qué es tan importante este sitio? ¿Qué pasó allí?  La respuesta a estas preguntas las encontramos en Génesis 12:6-7 cuando Abraham entra a la tierra de Israel: "Y entró Abraham a la tierra, hasta llegar a Shejem, hasta Eloné Moré, y en la tierra estaba entonces el Cnaanita, y se le apareció el Eterno a Abraham diciéndoles: A tu simiente daré esta tierra, y erigió Abraham allí un altar al Eterno que se le había aparecido"
Ahora todo queda más claro. Lo que la Torá nos quiere recalcar con esto es en primer lugar, que Dios está cumpliendo Sus  promesas, la que le hizo a Abraham precisamente en ese lugar, por eso es que Moshé les dice que esto es lo que deben hacer cuando pasen el Jordán para asentarse en la tierra, tal como lo hizo Abraham y donde Dios le prometió que esta tierra se la dará a sus descendientes. También le volvió a prometer al pueblo cuando salieron de Egipto Éxodo 6:6: Por lo tanto les dirás a los hijos de Israel: Yo soy el Eterno, y los sacaré de la servidumbre de Egipto, y los salvaré de la esclavitud y los salvaré con mano fuerte y grandes portentos, y los tomaré a ustedes para mí por pueblo y seré para ustedes Dios… y los traeré a ustedes a la tierra que juré darle a Abraham a Yitzhak y Yaacob, y os la daré por heredad.
En segundo lugar y más importante aún, es que todo sea tal como ocurrió con Abraham, los descendientes, están repitiendo los sucesos de los patriarcas. 
Así como Abraham entra a la tierra de Israel por orden de Dios, así lo hace ahora el pueblo de Israel. 
De la manera en que Abraham fue fiel a todo lo que Dios le decía, como dice: "Y vino Abraham, tal como le había dicho Dios", de la misma manera el pueblo debe ser fiel a Dios en todo lo que les encomendó. 
Tal  como Abraham inmediatamente hace un altar para servir a Dios, ellos también deben servir a Dios.
Y lo más importante: Abraham al entrar a la tierra tenía como objetivo proclamar el Nombre de Dios, es decir, enseñar y hacer conocer a los demás el camino de Dios, eso es lo que sus descendientes deben hacer ahora. Destruir los altares idólatras, proclamar la fe y el camino de Dios, principalmente, cumpliendo el pacto con Dios.
De esta manera, tal como Abraham recibió la tierra por mérito, el pueblo de Israel debe saber que la tierra la poseerán por el mérito.
Moshé, en el monte Sinaí, hizo el altar exactamente como hizo Abraham y ahora que van a entrar a la tierra de Israel, el pueblo debe entrar a la tierra de una manera que quede grabada en la memoria y que sea el objetivo de su entrada, por el mérito de Abraham, para ir en los caminos que señaló Abraham: Obedeciendo a Dios, siendo fieles a Dios, sirviendo a Dios y proclamando su Nombre (fe).