La Torá debe influir sobre la persona

La Torá debe influir sobre la persona

¿A qué se refirió la Torá al mencionar “todo el poder fuerte y toda la manifestación magna que había hecho Moshé a ojos de todo Israel” (Versículo 12)? ¿Acaso la Torá alude aquí, Dios libre y guarde, a un régimen de temor, o a algún suceso en particular?  De ser así, ¿de qué se trata? Jazal, nuestros Sabios de Bendita Memoria, explicaron que se trata de la ruptura de las Tablas-¿y acaso es éste el suceso decisivo que vale la pena recordar?

Parece que nuestros Sabios, en su interpretación, quisieron expresar la idea básica de comprender la esencia de la Torá y la diferencia entre su estudio con el de otras disciplinas. Cuando concluimos la lectura de la Torá, debemos preguntarnos a nosotros mismos, ¿qué es lo que nos ha quedado de dicha lectura? ¿Acaso fue éste, otro libro agradable que nos inspiró y  emocionó por un instante, pero inmediatamente después, cada uno retornó a sus ocupaciones, y el libro no nos dejó una impronta profunda ni cambió radicalmente nuestro ser interior y nuestros actos?

Viene la Torá, y nos recuerda que al inicio del camino, el comienzo de la senda del pueblo de Israel y su Torá, se registró un evento constitutivo que tuvo lugar para delinear una conexión entre nosotros y la Torá. Sólo cuarenta días después de la entrega de la Torá, que en la previa de la misma, todo el pueblo proclamó “Haremos y escucharemos”, y de esa forma, asumió entre otras cosas, la prohibición de la idolatría y la de inclinarse ante una escultura, y entonces vinieron los hijos de este pueblo y se arrodillaron ante el becerro de oro. La reacción inmediata y enérgica de Moshé fue: pues entonces, no hay Torá. No es posible que la Torá esté colocada en la biblioteca y no provoque en nosotros un cambio significativo. Si la Torá está ubicada en un ángulo y no genera en nosotros un cambio profundo de conciencia, pues mejor que ni siquiera esté en nuestras manos.

Al concluir la Torá, la persona debe formularse a sí misma las preguntas esenciales que sin ellas su estudio no tiene valor alguno: no sólo aquello que estudió en la Torá, sino también (y principalmente) aquello que la Torá le enseñó a ella, qué es lo que construyó en su interior.

Editado por el equipo del sitio del Tanaj del libro "Parashá baktaná" publicado por "Maguid".

 

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