Korbanot:¿Los sacrificios son algo bueno?

Korbanot:¿Los sacrificios son algo bueno?

Los Korbanot ¿Los sacrificios son algo bueno o es algo que la Torá tolera?
El gran dilema que se presenta cuando se analiza el tema de los sacrificios es: 
¿Este es un precepto que posee un objetivo por sí mismo o fue una costumbre primitiva que fue tolerada por la Torá?
Luego que la Torá nos relata acerca de todos los utensilios del santuario, lo primero que nos menciona la Torá será acerca de los Korbanot – los sacrificios que debían hacerse en el tabernáculo.
Luego de que nos relata acerca de los Korbanot, concluye con tres versículos que nos hablan de los tres objetivos del santuario:
1. "Me reuniré allí con ustedes" es por eso que uno de los nombres del santuario será: La tienda de reunión.
2. "Moraré dentro del pueblo de Israel" es por eso que uno de los nombres del santuario será: Mishkan – Morada
3. "Y será santificado con Mi presencia" es por eso que uno de los nombres del santuario será: Mikdash – Santuario.
A lo largo de toda la Biblia veremos opiniones que aparentemente se contraponen en cuanto a los korvanot. En algunos versículos se refleja claramente que es algo que la Torá ve con buenos ojos y aspira a ello como un ideal, como una actitud alabable y digna de llevar a cabo.
Por otro lado encontraremos versículos cuyo significado claro y literal es que todo lo concerniente a los Korbanot, no es una actitud a la cual la Torá aspira sino más bien una actitud humana de aquella época que la Torá va a tolerar. 
Ejemplos de la primera postura son: las  parashiot como Terumá, Tetzavé, parte de Ki Tisá, Vaiahakel y Pekude, que suman en total más de 440 versículos, que nos hablan del santuario y la labor que en él se hace, entre ellas los Korbanot, nos insinúa que es algo importante, de lo contrario no dedicaría tantos versículos. Más aun, casi todo el libro Vaikrá, tiene como tema central el tema de los Korbanot.
El Mishné Torá de Rambam, que contiene toda la Torá Oral, está compuesto por un total de catorce tomos, de los cuales tres hablan acerca del tema de los Korbanot.
Del total de los 613 preceptos, 176 preceptos tienen que ver con los Korbanot, es decir casi un cuarto de los preceptos tienen que ver con este tema.
Tantos detalles y preceptos nos vienen a recalcar que no se trata de algo que la Torá toleró, sino más bien se trata de un asunto que es muy importante para la Torá, es por eso que le va a dedicar tantos mandamientos y pormenores.
Argumentos para la segunda postura: En los diez mandamientos, que fue la base del pacto entre Dios y el pueblo, no figura ningún mandamiento que tenga que ver con los Korbanot.
Entre los patriarcas, no encontramos casi ninguno que ofrece Korbanot, a excepción de una sola vez con Abraham, en el sacrificio de Itzjak y con Yaacob antes de bajar a Egipto a encontrarse con su bien amado Yosef.
En los profetas abundan los versículos en donde expresan el repudio de Dios hacia los Korbanot. Ver en Samuel I 15:22, en donde el profeta le reclama al rey Saúl: "Acaso el Eterno se complace en Holocaustos y sacrificios como en la obediencia a la voz del Eterno, he aquí que obedecerle, es mejor que sacrificar, y escuchar Su voz es más preciado que ofrendar al mejor de los carneros" 
Lo mismo sucede con el profeta Jeremías 7:22 dice: "Porque Yo no hablé a vuestros padres, ni les ordené en el día que los saqué de la tierra de Egipto con respecto a ofrendas o sacrificios, sino que esto es lo que les ordené: Escuchad Mi voz y Yo seré vuestro Dios, y vosotros seréis Mi pueblo y andaréis en todos los caminos que Yo os ordeno para que os vaya bien en todo"
Más aun, Isaías 1:10 nos dice: "¿para qué Me sirven a Mi tantos sacrificios que hacéis? Dice el Eterno. Harto estoy de carneros y sacrificios, No me complazco con la sangre de toros, ni de ovejas, ni de machos cabríos. Cuando venís a presentaros ante Mi ¿Quién ha requerido eso de vuestras manos? No traigáis más oblaciones. Ofrendas abominables son para Mi…".  
En Salmos 50:9 "No tomaré ningún novillo de tu casa ni machos cabríos de tus rebaños, porque Mío es todo animal de la tierra"
De los textos de Rambam, aparentemente se entiende claramente que todo lo que tiene que ver con los Korbanot es algo que fue legislado por la Torá como un instrumento de lucha contra la idolatría, es decir, servir a Dios, no como hacen los idolatras, es por eso que en los Korbanot habrá tantos detalles, justamente para que los Korbanot no sean de la manera que hacen los idólatras. Podríamos preguntarnos si es así, entonces ¿por qué no evitar del todo los Korbanot? A esto nos responderá que para los seres humanos de aquella época, esa era la forma normal de servir a un ser elevado.
Por otro lado Najmánides se opone tajantemente a esta opinión de Rambam y sostiene que el objetivo de los Korbanot tiene un profundo significado por sí mismo.
De lo que relatan los profetas, vemos claramente que ofrendar Korbanot a Dios, no está al mismo nivel que escuchar y obedecer la voz de Dios. Vemos  claramente a lo largo de la Torá que existen preceptos que están en un nivel superior a otros, es lo que los sabios dicen: Hay preceptos más leves y otros más graves. Si bien ambos tipos de preceptos forman parte de las ordenanzas y la voluntad de Dios, esto no quiere decir que aquel que no se colocó el Tefilín está en un nivel tan bajo como aquel que hizo idolatría o que mató.
Si analizamos más meticulosamente notaremos que luego que sellan el pacto con Dios en el monte Sinaí, nos relata que hicieron doce altares y ofrecieron Korbanot. Es decir que en realidad en el monte Sinaí en donde se hizo el pacto de los diez mandamientos, sí hubo Korbanot. Además lo primero que nos menciona al final de la perasha de Itró, luego de los diez mandamientos, son los detalles de cómo debería ser construido el altar en donde pueden ser ofrecidos los Korbanot.
Cuando Noaj sale del arca, lo primero que hace es hacer Korbanot de todos los animales puros, es decir decenas de animales. Y allí no podemos decir que se trataba de una actitud para contraponerse a la idolatría, pues fuera de Noaj y su familia no existía nadie más.
También Caín y Evel trajeron cada cual Korbanot a Dios. 
Entonces ¿Cuál es el motivo por el cual los profetas claman con tanta dureza en contra de los Korbanot?
¿Cuándo Dios no acepta los Korbanot? Dios no acepta los Korbanot cuando se trata de un soborno para Dios, es decir, que el individuo es un inicuo, una mala persona y luego viene a implorar el favor de Dios ofreciéndole un Korbán, como si fuera que es algo que Dios precisa, o un soborno a Dios para que no le envíe castigo por las cosas malas que hizo. Como por ejemplo un individuo de la mafia o del narcotráfico que viene al templo en el día de Kipur y dona un millón de dólares. Definitivamente, este tipo de actitud no será grata a los ojos de Dios, que busca la honradez, la honestidad y un corazón coherente entre lo que el ser humano hace y lo que piensa.
El comentarista Seforno, se cuestiona ¿Por qué está escrito en el versículo: "Aquel que ofrezca un Korbán  de él"? aparentemente está demás la última palabra. Obviamente que si trae una ofrenda es de él. El motivo por el cual agrega la palabra: de él es para decirnos que el Korbán no puede ser algo vació, y desconectado de la persona y sus actos, sino que tiene que ser un acto en el cual el individuo se somete plenamente a Dios y expresa su arrepentimiento por lo malo que hizo.
Aquel que va a ofrecer un Korbán, lo que está haciendo es reconocer que todo es de Dios y a Él le pertenece todo. Es por eso que se ofrecían, las primicias de todo fruto o cosecha, los primogénitos y el diezmo del ganado. 
Abraham nos demuestra cuál debe ser la actitud ideal cuando se va a ofrecer un Korbán. Debemos estar dispuestos a entregar a Dios aun lo más preciado que tenemos. Dios está por sobre todo valor, aun por sobre nuestros propios hijos.
Es por eso que el ofrecer un Korbán en sí mismo; no lo es todo, depende cuál es la intención del que lo ofrece. Si lo hace en la manera incorrecta, justo al contrario de lo que debería ser, es decir, que cree que le está "haciendo un favor a Dios" o "dándole algo que Él precisa", como si fuera que está chantajeando a Dios, o comprándolo con sus ofrendas;  entonces es despreciable y ante ellos claman los profetas con palabras muy duras. Pero si lo hace con sometimiento y de todo corazón, reconociendo que  Dios no precisa nada y que todo Le pertenece a Él, entonces, definitivamente,  esta actitud es positiva. 
 

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