Huesos de cerdo

Huesos de cerdo

El cerdo es el animal más identificado con los animales que fueron prohibidos para su consumo. Hallazgos arqueológicos demuestran que a lo largo de la historia el pueblo de Israel respetó a rajatabla no consumir cerdo aún en las épocas en las cuales practicó la idolatría y profanó el Shabat.

La evidencia más contundente de la preservación de la prohibición de consumir cerdo en épocas antiguas surge de la comparación entre los hallazgos descubiertos en ciudades israelíes y los hallazgos revelados en ciudades de otros pueblos en la Tierra de Israel. La revisión de los huesos de animales descubiertos en excavaciones arqueológicas en diversos sitios, nos indica que los animales de granja más habituales entre los habitantes no judíos del país fueron las ovejas, vacas y cerdos. A diferencia de ello, en las poblaciones identificadas como localidades israelíes prácticamente no fueron hallados huesos de cerdos!

Entonces, parece que a lo largo de la historia del pueblo de Israel, aunque hayan cometido graves pecados, fueron extremadamente cuidadosos en no consumir cerdo.

Este diagnóstico ayudó a abordar una interesante cuestión arqueológica bíblica. En excavaciones realizadas en “Tel Beit Shemesh” fue encontrado un poblado de la época de los jueces, con características de un poblado filisteo. De hecho, no fue hallada en él ninguna señal de población israelí que conocemos de las poblaciones de esa época en Judea y Samaria. El hecho fue sorprendente, ya que del libro Shmuel estudiamos sobre una población israelí en Beit Shemesh a la que llegó el Arca del Pacto de Dios tras permanecer siete meses en campo de los filisteos.

Esta contradicción despertó la duda de los excavadores y decidieron revisar los huesos de animales hallados en el lugar, y se pudo ver que a pesar de las características filisteas del predio, prácticamente no fueron hallados en él huesos de cerdo. A la luz de ello, la conclusión de los excavadores fue, que Beit Shemesh era un poblado israelí que resultó muy influenciado por la cultura filistea por su cercanía geográfica a la zona, pero a pesar de ello fueron sumamente cuidadosos en no consumir cerdo.

Resulta que el pueblo de Israel se cuidó de no consumir carne  de cerdo, incluso en épocas en las que practicó la idolatría y profanó el Shabat, y es posible que aún en esas épocas hayan consumido otros animales no Kosher.

Editado por el equipo del sitio del Tanaj del libro "Parashat Drajim: Mabat arjeologui vegueografi beparshiot hashavua" ("Encrucijada: una mirada arqueológica y geográfica de las secciones semanales de la Torá") publicado por "Maguid", 2014.

 

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