Esperanza de redención

Esperanza de redención

El entierro de Iaacov en la tierra de Kenaan y la promesa de sepultar a Iosef en esa tierra reflejan juntas una fuerte ancla que atrae al pueblo de Israel a retornar a su tierra, y que asegura permanentemente que la redención está muy próxima. A diferencia de Iaacov, los restos de Iosef quedan en el exilio y de ese modo, en cierta forma, Iosef acompaña al pueblo de Israel en su exilio.

El final del libro Bereshit es aparentemente el descenso a Egipto y el ocaso allí de cara al exilio

No obstante, de hecho, el libro Bereshit no concluye así sino con una historia de dos sepelios, que reflejan la esperanza de la redención:

La primera historia es el relato de la marcha de los hijos de Israel a la tierra de Kenaan, para sepultar a su padre Iaacov. El entierro de Iaacov en la tierra cierra el relato de los patriarcas, quienes todos fueron sepultados en la tierra de Kenaan, y esas sepulturas representan un punto de aferramiento fuerte y significativo de los hijos de Israel en la tierra de Kenaan. A pesar de que Iaacov falleció en Egipto, se ocupa de que sus hijos lo sepulten en la tierra de Kenaan, y de esa forma sientan el fuerte vínculo de ellos con la tierra, la tierra de sus antepasados y el sitio donde sus ancestros están sepultados.

El segundo episodio es el relato del entierro de Iosef, y el mismo no concluye, sino que tan solo comienza-Iosef solicita ser sepultado en la tierra de Kenaan, pero pide que no sea sepultado ahora, sino que él permanece con el pueblo de Israel en Egipto, y el testamento para su sepultura en la tierra de Kenaan representa parte de la esperanza de la redención. Cuando los hijos de Israel sean redimidos, ellos cumplirán la orden de Iosef y llevarán sus restos para ser sepultados en la tierra de Kenaan.

Prestemos atención que, a diferencia de Iaacov, que fue sepultado en la tierra de Israel, los restos de Iosef permanecen en el exilio junto al pueblo de Israel, y por así decirlo, Iosef  acompaña al pueblo de Israel en su exilio hasta que retornen a la tierra. ¿Cuál es el significado?

Hay dos cualidades centrales en la figura de Iosef, y ambas son muy importantes en favor de la sobrevivencia del pueblo en el exilio, y como preparación del pueblo hacia la redención.

Primero, Iosef tiene una particular capacidad para afrontar situaciones difíciles y salir de las mismas más fortalecido: fue vendido como esclavo a Egipto, e inmediatamente logra escalar posiciones en la casa de Potifar; es arrojado a la cárcel, y de inmediato logra allí un estatus importante; sale de la cárcel y se convierte en el segundo del rey de Egipto. La capacidad para afrontar situaciones difíciles y justamente, a partir de las mismas alcanzar posiciones más encumbradas es una cualidad muy importante para el pueblo de Israel  para sobrevivir en el exilio, y para salir del exilio fortalecidos. Una cualidad adicional de Iosef, que se refleja en su enfrentamiento personal con su exilio particular en Egipto, es su capacidad de continuar preservando su identidad.Iosef vivió muchos años entre los egipcios, pero no perdió su identidad. No ocultó su origen ni se avergonzó del mismo, y por eso todos sabían que es “hebreo”.

Estas dos cualidades acompañarán al pueblo de Israel en el exilio, lo fortalecerán, y finalmente posibilitarán la redención.

Editado por el equipo del sitio del Tanaj.

Gentileza del sitio VBM de la Academia Rabínica "Har Etzion".

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