La descripción completa de la creación del Hombre, el profundo sueño y la creación de una mujer de él, y todo lo que hay en el Huerto de Heden, fue hecha para un propósito – la constitución de una familia. 

El capítulo 1 es el capítulo de la creación y concluye con el Shabat (según la tradición judía y en oposición a la división cristiana). El capítulo 2 es el capítulo del “Huerto en Heden- al Oriente” (8) y concluye con la constitución de la familia, que justificará el título de apertura- “Así fue el nacimiento de los cielos y la tierra cuando fueron creados” (4). El “nacimiento” alude a los que nacerán- o en el Huerto del Heden, o fuera de él, pero todo el relato conduce a la familia. Y como de costumbre, al final aparece el versículo que expresa el objetivo superior: “Por ello, el hombre deja a su padre y a su madre y se adhiere a su mujer y se tornan en una sola carne.” (24)

No es obvio que un hombre dejará a su padre y a su madre, y mucho menos, una mujer. En el pasado existían formas de vida donde los niños se convertían en parte de la gran familia, con un estatus de esclavitud, y en términos incestuosos, y aún oímos hablar de esas cosas, incluso hoy en día. El versículo señala, "Por ello  el hombre deja a su padre y a su madre" - y es importante entender que también le dará poder a su esposa para dejar a su padre y a su madre (lo que a veces es aún más difícil), para ser "una sola carne", lo que significa tener hijos de ambos, tener una familia.

La descripción completa de la creación del Hombre, el hombre y su profundo sueño y la creación de una mujer de él, y todo lo que hay en el Huerto de Heden, fue hecha para un propósito – la constitución de una familia. 

El capítulo 1 conduce al Shabat, el capítulo 2 a la familia.

Gentileza sitio 929