¿Qué significa un esfuerzo adecuado?

¿Qué significa un esfuerzo adecuado?

¿Por qué Jaza”l (nuestros Sabios deBendita Memoria) critican a Iosef por solicitarle ayuda al Maestro de Coperos? ¿Cuál sería el esfuerzo humano adecuado y cuándo resulta invalidado?

Después que Iosef le interpreta favorablemente el sueño al Maestro de Coperos y le informa que él retornará a su cargo en el palacio del Faraón, en forma inmediata le formula un emotivo pedido: “Si sólo habrás de recordarme, contigo, cuando se te haga el bien y habrás de hacer conmigo por favor, bondad, mencióname ante Paró” (Versículo 14). Mas todo este esfuerzo de Iosef fue en vano, tal como lo testimonia el versículo: “Mas no recordó el Maestro de Coperos a Iosef y le olvidó” (Versículo 23).

En referencia a este versículo, Rashi escribe a partir del MidrashRabá (Fragmento 9, 1)“Debido a que Iosef depositó en él la misión de recordarlo, debió permanecer preso por dos años”. El Midrash prosigue y cita el versículo 5 del capítulo 40 del libro Tehilim, Salmos: “Digno de alabanza es el hombre que ha puesto a Dios como su refugio y no recurre a la ayuda de los soberbios” y explican “ y no confía en los egipcios quienes son denominados soberbios”.

No obstante, estos conceptos generan una gran sorpresa: ¿Acaso Iosef el Tzadik está exento de realizar todo esfuerzo en pos de su salvación, y sólo debe confiar en la Misericordia Celestial sin mover ni un dedo de su parte?

Quizás la respuesta a este interrogante se encuentra en el paralelismo entre Iosef y Iaacov. Iaacov- se prepara a sí mismo para “entregar presentes” y para “la guerra”, pero sabe muy bien que sin la plegaria desde lo profundo del corazón, sus actos no tienen valor alguno, y por ello en forma simultánea con todo el esfuerzo se dirige también a Dios, y clama: “Sálvame de la mano de mi hermano, de Esav” (Capítulo 32, versículo 12). Mientras que por su parte Iosef- en su pedido al Maestro de los Coperos, supedita todo a su dependencia, hasta tal punto que concluye sus palabras diciendo: “Y sácame de esta casa” (Versículo 14)-como si el Maestro de los Coperos fuera Todopoderoso y todo está en sus manos.

“El punto de equilibrio” entre el esfuerzo y la confianza en Dios, se refleja de un modo muy claro en las palabras de Yoav ben Tzruia, oficial de guerra de Israel,al encontrarse en guerra contra Bnei Amón: “Fortalezcámonos por nuestro pueblo y por la ciudades de nuestro Dios y Dios hará lo bueno a sus ojos (a su parecer)”(Shmuel II, versículos 10-12)

Editado por el equipo del sitio del Tanaj de la serie "Meat min Haor", publicada por la Biblioteca Beit El con la colaboración de la organización "Orot".

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